I'm Hung Up!

Conocemos la disciplina atlética de Madonna para pasarse cuatro o cinco meses de gira y ofrecer espectáculos de primer nivel sin mostrar signos de cansancio. Pero desde 1983 con aquel Everybody no la habíamo svisto patearse las televisión con tanto ahínco como en 2005 con Hung Up... A esas alturas cualquiera podría pensar que no necesitaba tal promoción, de hecho se dio cuenta de ello con Hard candy y tan solo ofreció tres shows en tres ciudades clave que le sirvieron de promo para todo el planeta. Pero en 2005 tenía que recuperarse del batacazo de American Life (cuando también se recorrió los platós de medio mundo occidental) y darse a conocer de nuevo con reina de la música disco. La particularidad de la promoción de Hung Up es que ofreció la misma actuación en diferentes partes del mundo con diferentes trapitos. Nuestra favorita es la de Japon, tanto por el rojo pasión de su traje como por esa expresiva realización nipona que tanto nos gusta.

El gran retorno de Madonna a las pistas de baile tras el sublime aunque solemne American Life se produjo en los MTV European Music Awards. Allí berreó pero a nadie le importó porque bailó hasta el agotamiento en un espectáculo lleno de luz y color (¡salia de una bola de espejos!).


Después llegaron las actuaciones en vivo. Londres, Nueva York y Tokio fueron las ciudades elegidas. También actuó en el mítico festival de Coachella.


¿Alguien puede imaginar a Madonna actuando en ¿Qué apostamos? Pues es una asidua de la versión alemana del concurso, y allí se llevó su chou de Hung Up, en esta ocasión de blanco.


En París también estuvo pero allí, al ponerse un pesado vestido de metal, se dejó de coreografías y de parafernalia. Sin embargo en su querido Japón, a donde no iba desde 1998, realizó la presentación de Hung Up quizá más interesante y divertida. El modelito Dolce & Gabbana de esta ocasión era rojo y habían creado con letras gigantes igualitas a la del disco la palabra Madonna. Se trataba del programa SmapxSmap de Fuji TV, un supuesto "programa loco" (¡uuuh!) de la tele nipona. Como siempre, incluyeron la letra en subtítulos para que todo amante de su música pudiera cantarla.Como en ocasiones anteriores ahí estaba Stuart Price en los teclados para hacer la pantomima, ya que todo el sonido era pregrabado. Un momento sublime, ¡sin duda alguna!


En Tokio fue donde ofreció otro de esos showcases a los que se ha acostumbrado desde Music, además de una rueda de prensa sobre música (¡algo que no hacía desde Ray Of Light!). Al parecer en el concierto, hubo una pancarta que no le gustó y bajó ella misma a romperla.


Hubo otras actuaciones como en el programa de Parkinson o en el benéfico Children in Need, pero para volver a ver su mítico montaje escénico tuvimos que esperar a los Grammys de 2006, donde empalmó su tema con Feel good de Gorillaz en una mezcla fantástica de la que ojalá se hubiera hecho un tema completa. hubiera sido la mejor remzcla acústica de Hung Up ever. Esta vez el modelito era un corsé con traje de baño al estilo Sorry.


Ese mismo verano comenzó el Confessions Tour que, para muchos fans es una de sus mejores giras. Como no podía ser de otra manera, cerraba el espectáculo con Hung Up en una versión ampliada y mejorada del montaje televisivo.


Para amortizar el atrezzo -esa especie de portamaletas de hotel tenía que estar , esta vez con un elegante bañador negromegamanoseado- repitió la actuación un año después en el concierto benéficio Live 8 en Londres, esta vez con un elegante y ceñido traje negro (una tónica en su carrera a partir de ahora).