Sexto sencillo y uno de sus videoclips más ambiciosos, Katy Perry "no repara en gastos" cuando se trata de promocionar su carrera. Esto no tiene nada que ver con Rihanna y sus videos barateros para ir cubriendo el expediente como California King Bed o Cheers, sino de una historia rodada en formato videoclip. El argumento es muy sencillo y deliberadamente lacrimógeno, casi patético (con el significado que patético ha tenido siempre, no el despectivo). Sin embargo la factura es impecable, un tanto inusual para un SEXTO VIDEOCLIP de un disco, cifra a la que llegan muy pocos con tanto nivel. Sin duda La Perry nos ha sorprendido positivamente con su inusitada ambición artística. Pero no vale la pena extenderse más, sino que tú mismo te deleites con The One That Got Away. ¿Llegará al número uno del Billboard?
1 comment:
llego al numero 1?
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