Canción de la semana

*N Sync fue uno de las últimas boybands creadas para el éxito. Su creador fue Lou Pearlman que ya se había encargado de formar años antes a los BSB. Con tres disquitos arrasaron, lograron record de ventas - su disco No Strings Attached vendió 1 millón cien mil ejemplares el primer día de su salida a la venta, bonita leyenda de aquellos tiempos en los que importaban las ventas-, enamoraron a medio planeta y se marcharon por todo lo alto con Celebrity, un disco que concentraba jugosamente el sonido del momento de la mano de genios como Max Martin, Rodney Jerkins, Brian McKnight. La banda había sido confeccionada para que dos de los miembros destacasen por encima de los demás. JC Chasez y Justin Timberlake eran más atractivos y mejores bailarines que Lance Bass, Chris Kirkpatrick y Joey Fatone. Estos tres servían de coristas aunque también tomaban cierto protagonismo en solitario.

A día de hoy se sigue hablando de reunión, de hecho le deben un disco a Jive Records, sin embargo Justin Timberlake parece demasiado ocupado con su carrera en solitario y la verdad es que le va de lujo. Queremos rescatar un tema de ese último trabajao, que se llama The Game is Over, que utiliza los sonidos de las máquinas tragaperras y los videojuegos de los ochenta para crear un matéfora sobre el amor... ¡oh! Aquí tienes una magnífica actuación en directo, con subtítulos en ruso por si no entiendes algo de la letra en inglés.