
Amaia Montero lanza un segundo disco que no se caracteriza por su originalidad, con el que se marca un “Marta Sánchez” de manual. ¿Que qué significa eso? Sigue leyendo..
Basta echar un vistazo a su título “2”… para percibir lo que contiene. Esta técnica para titular álbumes no es nada original ni interesante a día de hoy, y supone un intento ridículo de resultar moderna. Por suerte el contenido no es demasiado aburrido… se nota que han cuidado la producción aunque cada tema recuerde a tantas otras canciones. En general todo nos resulta un "deja vu", por eso lo de marcarse un "Marta Sánchez". Hace unas semanas ya dejamos claro que el single presentación, Caminando, era clavadito a Geografía de su exbanda LODVG. Pero con el disco completo hemos podido comprobar que ha decidido inspirarse en composiciones ajenas, tanto de su exbanda como de otros artistas, para crear el resto de temas. La colección se abre con Cuestión de suerte, con un órgano y coro muy góspel, cuyos versos nos recuerdan EXAGERADAMENTE a Sorry seems to be the hardest Word de Elton John, que hace unos cuantos años revitalizó junto a la boyband Blue. Pero lo más flagrante y vergonzoso llega con Donde estabas, corte número tres, que es clavadito a 20 de enero, aquel hit pseudoelectrónico que interpretaba con su banda allá por 2003. Si uno sigue escuchando el disco, se tropieza con Sabes, una canción resultona cuya gracia se debe a ser una radiografía del Color Esperanza de Diego Torres. Hasta el momento no hemos encontrado más parecidos razonables, pero mientras seguimos analizando las canciones, sí que se percibe que ciertos temas, recuerdan al estilo de otros artistas.

En la foto: Amaia lista para simular un cunilingus.