Friday 31 October 2008

Halloween de todos los santos


Como una gran parte de la música que escuchamos proviene del mundo anglosajón, es inevitable que conozcamos las canciones que dedican a su festividad de Halloween. Todos los años los medios de comunicación elaboran sus listas de temazos que pueden sonar en una fiesta a la que acuden aquellos que ya están mayorcitos para el trick or treat tradicional (porque llegados a la adolescencia se me ocurren tricks and treats mas interesantes ;)

Después de consultar a una heterogéna amalgama de gentua y unas cuantas mierdawebs he recopilado aquellas canciones que, desde el criterio de musicanismos me parecen las más interesantes, divertidas y pintonas.

Como no queremos olvidarnos de Maicol y es el que normalmente ocupa los primeros puestos de las listas de Halloween, comenzaremos por él. Es inevitable recomendar para questa notte la madre de todas las canciones de terror

¡¡¡THRILLER!!!

Y como lo que queremos desde aquí es acojonarte viva o vivo. Te dejamos esta versión a manos de la tonadillera de Alcorcón:



Aquí encontrarás la versión de estudio: http://www.youtube.com/watch?v=Z6lDFUMLSqw

Otras melodías imprescindibles para tan señalada fecha son las de las famosas comedias televisivas que se reían de los personajes de la literatura clásica de terror. Los mayores de 20 años recordamos las últimas reposiciones de Los Munsters:



Y la de sus imitadores, posteriormente recuperados en una serie de películas y dibujos animados para TV. ¡¡¡¡La Familia Adams!!!!



Aunque Nina Simone o Creedence Clearwater Revival la interpretaron con gracia, yo me quedo con aquella versión de Bette Mildler en una de las películas que marcó mi infancia LAs Brujas de Salem (Hocus Pocus)(allí es donde ooí hablar por primera vez de Madonna, gracias al disfraz de la madre):



Son tantas las que podemos comentar: Number of the beast de Iron Maiden, Halloween Parade de Lou Reed, Scary Monsters (and Super Creeps)de Mr. Bowie, Voodoo Dolly de Siouxsie & the Banshees son algunas excelsas tonadas de terros procedentes del mundo del rock o Supernatural, cara B de Cherish, el tercer single de Like a Prayer de Madonna.



O Aqua que también nos deleitó con una de miedito:



Pero se acerca la hora de las brujas y no me gustaría estar solo cuando lleguen los espíritus, así que no me dilato más y os dejo con Ray Parker J., Steve Miller, Danny Elfman y Rocky Horror Picture Show.


Terror ochentero



Más ochentas ¡qué horror!



Marilyn Manson y Panic at the disco! la han cantado, pero la mejor es la original, la de Danny Elfman



Uno de los mejores musicales EVER

Wednesday 29 October 2008

Ascenso y caída de la ciudad de Metrophonic I


Hubo un tiempo en la que el reinado del dance, ese trono codiciado desde su creación en la década de los años setenta, estaba ocupado por Brian Rawling y Mark Taylor (acompañados de su corte Todd Terry, Paul Barry y Steve Torch).

La coyuntura del cambio de siglo fue testigo del auge de su Imperio sonoro durante el que bajo el nombre de Metrophonic monopolizaron las pistas de baile con sus irresistibles producciones, festivos encuentros tendencias electrónicas con guitarras acústicas y pianos. Tal fue su dominio, que consiguieron resucitar la carrera de Cher. Justamente hace diez años, produjeron uno de los discos más importantes en la historia de la música dance: Believe. Con este trabajo Cher fue número uno en casi todos los países en los que se vendían cedés y cintas de cassette y dio a conocer al mundo el vocoder, ese efecto que modifica la voz como si de un robot se tratase. Aquel otoño de 1998 supuso un punto de inflexión: nada volvería a ser igual, el eurodance absorbería su influencia, y el vocoder del támdem Rawling-Taylor y su séquito envolvería con sus polvos mágicos la galaxia pop de Occidente.


Cher a la edad que Madonna tiene ahora


Ahora todo el mundo quiere un Timbaland en su vida, hace diez años (y hace seis también) un disco no triunfaría si no incluía algún tema grabado por ellos. En nuestro país, Mónica Naranjo, Marta Sánchez o Chenoa lograron ser sodomizadas por su sonido (y otros muchos mamarrachos de los que hablaremos en otro momento). Tina Turner, Celine Dion, Britney Spears, Enrique Iglesias, Lara Fabián, Belinda Carlisle, Andrea Bocelli, Bananarama, Ricky Martin, Kylie Minogue, Lionel Richie y Rod Stewart se rindieron a sus pies a lo largo de esta década. Pero al igual que la de Roma, la hegemonía de Metrophonic (junto a la del sueco Max Martin) no podía ser eterna y silenciosamente fueron diluyéndose entre numerosos imitadores y el auge del “sonido urbano” encarnado en The Neptunes, Timbaland, la electrónica francesa y el eurodance sueco e italiano.

A continuación os ofrecemos algunos de sus trabajos:



Tina Turner a la dulce edad de 60 años



Cher, Todo o nada, como Inma de Gran Hermano



I'm not a girl, but just a whore, mucho mejor con la producción de Brian



En una noche como esta, fantástica tonada de la australiana: con chunda chunda por lo bajini, guitarricas españolas y coros sotto voce



Soc Jo, de Marta Sánchez: ¿producir fuera del mundo anglosajón? El principio del fin



La disquera de la Naranjo también pagó un pastón para que le produjeran la cancioncita

Tuesday 28 October 2008

Consultorio pop: Cómo superar la marcha de tu líder

Cuanto más simple es una operación su margen de error es menor. Por eso si se reduce a una sola cara la imagen de una banda de música, más cómoda será la promoción. Esta máxima del “cuánto más sencillo mejor” impregna la música pop.

Líderes, portavoces de una banda y carismáticas imágenes muy útiles para identificar al conjunto. Es imposible no reconocer a Texas gracias a la morena de labios carnosos Sharleen Spiteri, o a El Canto del Loco, por el pizpireto y macarrilla Dani Martín. La dictadura del líder está servida pues qué podríamos hacer cuando esa “marca de la casa” se esfuma. Hace más de veinte años Olé Olé pasó por tan cruda situación con la marcha de Vicky Larraz. Enseguida encontraron a Marta Sánchez para superar esta primera crisis y los éxitos no se hicieron esperar. Por eso, cuando hace un año Amaia Montero anunció que dejaba La Oreja de Van Gogh todos recordamos a Olé Olé. En esta ocasión, las diferencias de Montero con el resto del grupo parece que sólo podían resolverse con la separación.

¿Pasarán los lunes al sol tras la marcha de Amaia?


La tragedia se instala entre ellos ¡Qué hacer! ¿Cómo sustituir la personalísima voz de Amaia?

No parecía sencillo, sin embargo en las vidas de Pablo, Álvaro, Haritz y Xavi apareció Leire Martínez, una de las participantes del reality musical Factor X, la esperanza personificada. Todo parecía encajar: chica guapa, conocida y con una voz diferente al resto pero similar a la de Amaia.

¿A que no se nota el cambio?


¿Se puede pedir más?

Sí, composiciones pop de estribillos acrobáticos y letras naïf como El último vals, primer single de A las cinco en el Astoria, que nada tiene que envidiar a sus anteriores grabaciones. Pero tratando tan peculiar tema, no podemos olvidarnos de Presuntos Implicados y la marcha de Sole Jiménez, que tras más de veinte años al frente, deja paso por una "manera distinta y personal de entender las relaciones" a Lydia Rodríguez, aquella chica que representó en 1999 a España en Eurovisión con y que ha publicado tres álbumes de estudio de discutible éxito. Su voz es muy parecida a la de Sole e incluso hay cierto parecido físico entre ambas (¿mismo piercing en la nariz?). Con Juan Luís Jiménez y Nacho Mañó, acaba de publicar Será, un trabajo que abre una nueva etapa a la banda y a su nueva vocalista.

Al final, todos salen ganando.

¿Problemas en la cama? Laura de América hubiera puesto remedio


Estampa campestre pretérita


Estampa campestre presente

Thursday 23 October 2008

Mónica Naranjo: un exceso que sabe a poco



En la carrera de Mónica existen muchas sombras que no permiten hacernos una idea completa de su personalidad, o acerca de la dirección que quiere tomar su sonido. Para cada entrevista tiene preparado un acento diferente y es experta en parecer atiborrada de tranquilizantes cuando se encuentra frente un periodista. Hace un año anunció en una fugaz temporada de Sorpresa Sorpresa que estaba ultimando su nuevo álbum y que sería completamente distinto. Así fue Europa el single presentación de ese disco que preludiaba sonoridades oscuras en las que el rock y el techno se hermanarían en paz y armonía con letras que traspasarían la frontera del “oh baby, cuánto te echo de menos”. Barroquismo del que le gusta a la Trasobares con un punto burtoniano (más en el diseño del libreto que en el sonido), decadencia y mucho dramaqueenismo conformaron finalmente Tarántula. Un acierto, aunque no salvaríamos de la quema más que un puñado de canciones (Europa, Amor y Lujo, Diles que no y poco más), que ni los excesivos videoclips de gusto cuestionable nos arrebatarán.



Con todo esto, cualquiera que no la odiase en exceso podría esperar un tour de conciertos de lo más vanguardista y excesivo. Más aún cuando Hansel Cereza, que ha trabajado con La Fura dels Baus y Le Cirque du Soleil dirigiría a la tonadillera de Figueras. Pero de nuevo el fantasma choni que persigue a la Naranjo desde sus comienzos (desde Sólo se vive una vez y aquellos videos hipermega-low cost) llegó para impregnarlo todo con su repertorio de recursos pasados de moda. Antes de continuar, hay que parase para admirar la paciencia de una gran parte de sus fans, fervientes admiradores del chunda chunda divesco de extrarradio con el que se dio a conocer, por aguantar lo que Mónica les tenía preparado, en las antípodas de lo que ellos podían esperar.



La resurrección es el motivo que abre el espectáculo con una Mónica colgada de un arnés que se balancea mientras que hace que sea el público quien interprete Desátame casi por completo. Eso si, cuando le toca a ella, chorrazo de voz. Ya desde el principio despliega toda su pantomima gótico-rockera, aquella de la que bandas como Within Temptation o el mísmiso Marilyn Manson ya dejaron atrás y que fue transgresora a principios de los noventa (la cultura pop fagocita las tendencias que encuentra a su paso como una bola de critters arrasa entre los pobres campesinos). Curiosa resultó ser la división del espectáculo en dos partes: las primeras cinco canciones fueron éxitos de ayer, la ya mencionada Desátame, Aprender del amor, Sólo se vive una vez, Pantera en libertad y Perra Enamorada (ni rastro de Chicas Malas, como era de esperar, pues tiene mucha tirria a su anterior trabajo, ni del discotequero If You Leave Me Now).



La segunda parte, más larga, estaba compuesta por esas sofisticadas y vanguardistas composiciones de Tarántula. Usted despedía sus antiguos éxitos y nos demostraba en directo que la aquella voz aguda es realmente la de Mónica (¡Qué versatilidad vocal, por dios!). Con el mensaje político del tema podía haberse valido de una puesta en escena temática (no sé, sacar a un bailarín disfrazado de Tío Sam o Aznar como hace Ska-P o un videaco como los que te mete por los ojos Madonna), pero no, el rollo gótico es lo que toca. Gótico y repetitivo pues los nuevos arreglos musicales hacían de todo menos dotar a las canciones de personalidad propia, todas sonaba IGUAL. Podemos comprenderlo de alguna manera, al indagar y darnos cuenta de que el director musical, al que habría que denunciar por la vía penal, es Pablo Navarro, director musical de Queen (que musicalmente no estaba mal, aunque la traducción del libreto al castellano lo convierta en una soez versión infantil). ¿Esto que suena qué es? ¿Es Todo Mentira? ¿Óyeme? ¿I Want to Break Free? Ojalá hubiera sido esta última, pero tuvimos que conformarnos con Todo Mentira en la que nos pide que nos olvidemos de todo y nos centremos en el amor (sí hombre, lo que nos faltaba), con Diles que no (que comienza como si se tratara de un anuncio de Pepsi) e Idilio, en forma de interludio con los “outtakes” de cualquier chou de La Fura (bailarinas colgantes de telas, un tío con cresta, en bolas, con cara de pocos amigos…). Tras el break para cambiar de traje (los que estábamos a la derecha del escenario podíamos ver cómo se quedaba en bragas), Para Siempre un momento de tranquilidad (¿acaso eso es lo que queremos?) y después ¡POR FIN! Un poco de marcha.



Con un váter dorado frente al escenario y tras un pequeño paripé, emerge Mónica desde atrás interpretando a capella Amor y Lujo, en ese momento aprovecha y exclama aquello que ella cree que hace gracia a sus fans (muy familiarizados con las ordinarieces sarasistas)

¡ME TENÉIS HASTA LA RAJA!

El recinto explota en risotadas, muchas de las cuales seguramente no sean resultado del chiste sino de la tensión acumulada de sus fans por negárseles un espectáculo verdaderamente “naranjil”. De nuevo la producción musical echa a perder este temazo, que podría haberse convertido en el momento decadente de la noche (en el buen sentido, es decir, una decadencia buscada, no una involuntaria), y que no canta ella, sino sus coristas (¿?).

Mónica tenía que desplegar sus dotes interpretativas, y decidió sincerarse ante nosotros. Sentadita, pues Amor y Lujo la habían dejado derrengadita perdida, nos avisó de que algún día tenía que contarnos algo muy importante, pero que todavía no era el momento… (¿Acaso Mónica nació llamándose Alfredo?) y se puso a divagar sobre la responsabilidad de los padres en la educación de os hijos porque ahora ella es madre (madrastra) y lo vive en sus carnes.

Y para el final no podíamos esperar nada mejor que Europa y Sobreviviré. Sin duda alguna dos de sus grandes canciones, himnos oscuros de miedo y superación que honran a Mónica y que nos ofrecen un rayito de esperanza a los que creemos que ella lo vale.



Repertorio:

01. Desátame
02. Aprender del amor
03. Sólo se vive una vez
04. Pantera en libertad
05. Perra enamorada
06. Usted
07. Todo mentira
08. Diles que no
09. Idilio (interludio)
10. Kambalaya
11. Para siempre
12. Amor y lujo
a. Bis
13. Europa
14. Sobreviviré