Para un pagano como yo, no familiarizado con el coleccionismo más fanático (aunque tengo mis objetos preciados), resulta un misterio la manera en la que muchos seguidores se hacen con copias de los masters de grabación de estrellas como Madonna. Por lo que tengo entendido, artistas y discográficas guardan con mucho celo sus canciones para que no se filtren antes de tiempo, y esconden como oro en paño las sesiones de grabación y todo el material descartado que puede, y suele, recuperarse tiempo después. Así que no entiendo cómo Madonna no pone el grito en el cielo cuando se filtran las canciones que deliberadamente ha querido ocultar a su público y que, de alguna manera, ya no puede explotar comercialmente.Aún así nos alegramos desde MUSICANISMOS de que surjan una o dos veces al año unos cuantos de sus temas, como ha pasado recientemente con maquetas pertenecientes a diferentes épocas. Ahora gracias a las redes sociales, los traficantes pueden ofrecer sus suculentos tesoros por todo el planeta y enviar los temas digitalmente en cuestión de segundos. En estos días, el perfil "Madonnademos Madonna Demos Collectors" es el que ha estado negociando. Ha ido liberando temas inéditos en forma de maqueta las versiones de estudio de las canciones del Sticky & Sweet Tour y algunos videos que acompañan las actuaciones, según iba solicitando otras rarezas. No se trata de lucrarse, sino de conseguir otras joyas con las que traficar hasta que el repertorio inédito de Madonna se agote.
Gracias a estas filtraciones, esta semana ha quedado patente que la Reina del Pop intentó con todas sus fuerzas (con esos brazotes deben ser muchas) hacer algo de calidad hace unos años. Después de Music, ese álbum que aúna vanguardia electrónica, pseudofolk, pop y dance, se empeño en convertirse en Joan Baez y grabó todas las maquetas de American Life en acústico. Al año siguiente, durante su gira The Re-Invention Tour, compuso y grabó unos cuantos temas para el musical Hello Suckers que finalmente no vio la luz. De aquellas sesiones ya hemos conocido In This Love (Bon d'accord), de donde extrajo unos versos para Voices (Hard candy, 2008) e If You Go Away, una íntima versión a piano de Ne Me Quitte Pas ( (1959) de Jacques Brel. Una melodramática balada traducida del francés por Rod McKuen que ha sido interpretada en la lengua de Shakespeare por Tom Jones, Frank Sinatra, Cyndi Lauper o Barbra Streisand.
Pedro Almódovar estaría orgulloso de ella (creo que por primera vez). Seguramente ella consideró que estaba haciendo algo muy importante, pero poco comercial porque al año siguiente se pasó al dance, parece que con acierto, y a los dos años se pasó al pseudo "aranbí" sin tanta suerte. Para los que consideramos que los productos de Madonna han ido perdiendo calidad en la segunda mitad de la década (aunque Celebration es un temazo), nos reconforta saber que grabó música acorde a una mujer de su edad. No entienda el lector, por favor, que tenemos prejuicios, sino que la búsqueda desesperada del éxito ha llevado a nuestra aún diva por excelencia, a pasearse en bragas por los escenarios y a grabar temas carentes de personalidad y de interésa remolque de modas sin, ¡encima!, conseguir el éxito esperado. Por todo esto If You Go Away entra como brisa fresca en su repertorio conocido, aunque esté a años luz de las otras brillantes y sentidas versiones del clásico francés.
Muy pronto: Broken, Animal, Curtain, demos de American Life y mucho más.
